La Federación Panamericana de Squash (FPS), establecida en 1989, está compuesta por  veintitrés (23) países miembros con más de 2 millones de jugadores de squash activos. El Squash es un deporte reconocido por el Comité Olímpico Internacional (COI). Actualmente, cada miembro de FPS es reconocido por el Comité Olímpico Nacional de su país.

El Presidente de la FPS se convierte automáticamente en Vicepresidente del Comité Ejecutivo de la Federación Mundial de Squash (FSM), el organismo rector mundial de la calabaza, donde el FPS puede continuar abogando por la calabaza en Panamérica.

La FPS es responsable de realizar Campeonatos Panamericanos de Squash, juveniles y de mayores,  anuales, exceptuando el año de los Juegos Panamericanos; donde el Squash ha sido parte del programa de desde los Juegos Panamericanos Mar del Plata 1995 hasta la fecha, diez (10) países panamericanos diferentes han ganado medallas en squash en los Juegos Panamericanos.

El Squash es reconocido como un deporte limpio. La FPS, dirigido por una junta Directiva de voluntarios, supervisa la gestión técnica de todos los campeonatos panamericanos y proporciona liderazgo y colaboración para aumentar la visibilidad y el perfil deportivo. La FPS también continúa realizando programas regionales de entrenamiento y arbitraje a medida que el Squash experimenta un rápido crecimiento. El squash puede ser practicado por personas con discapacidades mentales, emocionales, físicas y también se ha convertido en una excelente vía para que atletas puedan ingresar a muchas de las mejores universidades y colegios en diferentes países.

Panamerica actualmente cuenta con 3 jugadores ranqueados entre los 10 primeros de la gira profesional mundial (PSA), el segundo número más alto de los 10 mejores jugadores mundiales en una región después de la Federación Africana de Squash.

El Squash, reconocido como uno de los deportes más saludables, es muy entretenido, inspirador y con su tecnología de punta de cancha de vidrio de cuatro paredes se ha convertido en un deporte fácilmente integrado que se juega en muchos de los lugares más emblemáticos del mundo. La tecnología ha explotado no solo en la fabricación, transmisión y transmisión en vivo, sino que ha revolucionado la enseñanza y el entrenamiento con su capacidad de analizar instantáneamente el comportamiento de la pelota y del jugador y proyectar módulos de entrenamiento interactivo en la pared frontal de una cancha de squash.